Mi paraíso infantil

Me pregunto si tod@s tuvimos un paraíso infantil. Yo, desde luego sí. Fue Valverde, la finca en la que vivían mis tíos Julia y Paco con mis prim@s, con l@s que estoy en la foto, Javier, Fernando y Marta. El muñeco que tengo en la mano es "el Tiburcio", “bautizado” así por mi primo Javier para “hacernos de rabiar” a Marta y a mi poniéndole el nombre más feo del mundo. Pero lo que él no sabía es que no nos importaba, porque era tan bonito, blandito y amoroso que lo de menos era su nombre. Llegar a Valverde desde mi casa, hace ya tantos años, cada uno en una punta de los extrarradios de Madrid, era toda una aventura. Y en cuanto llegaba me agarraba al Tiburcio y ya no lo soltaba y mi primita del alma siempre me lo dejaba. No recuerdo ni una sola discusión con ella cuando éramos pequeñas, siempre felices, “explorando” por el campo, cogiendo almendrucos, higos, viendo los animales… Valverde era la libertad, poder ir descalza sin que nadie me regañara, comer a deshora, jugar y jugar hasta que se hacía de noche.
¿Tú tuviste un paraíso infantil?

Yo con "el Tiburcio" y mis primos en Valverde